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EL PASO HACIA EL PARAÍSO: La Prohibición De Alardearse

EL PASO HACIA EL PARAÍSO
Dichos De Muhammad El Enviado De Dios
El-Imam Al-Nawawi
CAPÍTULO 240
La Prohibición De Alardearse

EL LIBRO DE LAS CUESTIONES PROHIBIDAS

Dios -alabado sea- dice:
"No se les ordenó sino adorar a Dios, con sincera devoción como verdaderos creyentes". El Sagrado Corán (98:5)

Y dice -alabado sea-:
"¡Oh creyente! No malogréis vuestra caridad al alardear de ella o al agraviar, como aquel que emplea sus bienes en busca de figurarse ante la gente". El Sagrado Corán (2:264)

Y dice -alabado sea-:
"Buscan ante la gente aparentarse e invocan, más bien, poco a Dios". El Sagrado Corán (4:142)

923. Abu Huraira (que Dios esté complacido de él) narró: He oído al Enviado de Dios (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) que decía: "Dios alabado sea dice: ¡En nada Me afecta que alguien asocie algo o alguien conmigo! Así que si uno realiza una obra, buscando el beneplácito de otros, además de mí, le abandonaré y le dejaré a ellos".

924. Abu Huraira (que Dios esté complacido de él) narró: He oído al Enviado de Dios (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) que decía: "Los primeros en ser juzgados, en el Día del Juicio, serán: un hombre que había caído en combate. Se le hará venir y se le recordarán los dones recibidos de Dios, y él los reconocerá.
Dios le preguntará: ¡Y cómo obraste para agradecerlos?.
Responderá: He combatido en Tu causa hasta caer como mártir.
Dirá: ¡Mientes! Has combatido para que se dijera que eras un valiente. Y, así se dijo.
Acto seguido, se le arrastrará sobre su rostro y se le echará en el Fuego.
El otro caso es de aquel que había adquirido y enseñado conocimientos y había estudiado el Sagrado Corán. Se le hará venir y se le recordarán los dones recibidos de Dios y, él los reconocerá.
Dios le preguntará: y ¿Cómo obraste para agradecerlos?
Responderá: Por Ti, adquirí el conocimiento y lo he enseñado, y también he estudiado el Sagrado Corán.
Dirá: ¡Mientes! Has estudiado tan solo para que se dijera: ¡Es un sabio! Y, así se dijo.
Acto seguido, se le arrastrara sobre su rostro y se le echará en el Fuego.
Y, el otro será un hombre a quien Dios concedió gran fortuna de distintos bienes. Se le hará venir y se le recordarán los dones recibidos de Dios y, él los reconocerá.
Dios le preguntará: ¿Y, cómo obraste para agradecerlos?.
Responderá: No he dejado una causa o vía en donde Te gustara que se gastara en ello, sin que lo hiciera por Ti.
Dirá: ¡Mientes! Lo has hecho para que se dijera: ¡Es muy generoso! Y, así se dijo.
Acto seguido, se le arrastrará sobre su rostro y se le echará en el Fuego".

925. Ibn U'mar (que Dios esté complacido de ambos) mencionó que unas personas le comentaron: Cuando nos encontramos en presencia de alguna de nuestras autoridades, nos dirigimos a ellos con elogios, todo lo contrario a lo que hablamos fuera. ¿Qué opinión te merece esta postura?.
Dijo: "Pues, en tiempos del Enviado de Dios (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) la considerábamos como una hipocresía".

926. Yundob Ibn Abdulah Ibn Sufian (que Dios esté complacido de él) narró que el Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: "Quien hiciera alguna buena obra en secreto, pero deseando que la gente la supiera. Dios la hará pública. Y, quien hiciera alguna buena obra en público en busca de elogios, Dios hará públicas sus intenciones".

Selección y Prologo: Prof. Dr. M.M Al-Azami
Traducción de texto: Ahmed M. Safi
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