El Verdadero Musulmán No Hace Diferencia Entre Sus Hijos E Hijas
Algunas personas se entristecen por haber tenido hijas, y quieren que Allah les dé sólo hijos varones. Ellos no conocen la gran recompensa que Allah le ha prometido al hombre que se le agraciado con hijas, y las acepta, cuida de ellas, les da una buena educación, y les brinda amor y afecto. Si supieran el premio que le espera al padre misericordioso con sus hijas, sentirían celos de él y querrían lo mismo también.
El Profeta (B y P) dijo:
"Quienquiera que tenga tres hijas, sea paciente con ellas, y las alimente y vista con lo mejor de su ingreso, serán para él una protección contra el Fuego el Día de la Resurrección".[1]
Según otra versión, él (B y P) dijo:
“Quienquiera que tenga tres hijas, las proteja, les proporcione lo que ellas necesiten y les demuestre compasión, se merecerá el Paraíso". Un hombre entre las personas le preguntó: ¿Y si son dos? ¡Oh, Mensajero de Allah! Y él dijo: "Sí, también si tiene dos".
¿Cómo puede el hombre dejar de cuidar a sus hijas y gastar en ellas cuando escucha hablar de los premios y las bendiciones que Allah tiene reservados para él?
El Islam, que es una religión práctica, reconoce las realidades de la vida de las personas en toda época y lugar. Previene el hecho de que una hija pueda divorciarse y retornar a la casa de su padre, y que éste pueda estar en circunstancias económicas difíciles o con muchos otros hijos para cuidar, entonces le ofrece a él los que alivia su alma y sus penas. El Islam le dice a este padre que cuidar a su hija, que ha regresado a su casa, es uno de los más grandes actos de caridad y que ello lo acercará más a Allah.
El Profeta (B y P) le dijo a Surâqah Ibn Yu‘shum: "¿Quieres que te informe cuál es la mejor forma de hacer caridad?" Y él dijo: Por supuesto ¡Oh, Mensajero de Allah! Entonces el Profeta (B y P) dijo: "Mantener a tu hija si ha a regresado a ti y no tiene ningún otro sostén".[2]
¡Qué diferencia hay entre el gran afecto y amor con que los hijos crecen en el mundo musulmán, y la vida áspera sufrida por los hijos en las sociedades liberales y materialistas, donde cuando un hijo o hija alcanza la edad de dieciocho años deja la casa familiar para enfrentar las realidades severas de la vida y ganarse la vida antes de estar preparado y sin contar con el amor y el apoyo de su familia! Hay una gran diferencia entre las leyes de Allah que traen felicidad a la humanidad, y las leyes inadecuadas de los hombres que sólo causan sufrimiento y dolor. No es sorprendente ver en los países occidentales, como resultado de las leyes materialistas, numerosos hombres jóvenes promiscuos y numerosas madres solteras, cuya cantidad crece día a día.